Teoría Existencialista del Cosmos.

Esto es un pequeño resumen de lo que PARA MÍ es lo más coherente para explicar El Todo, lo que me ha funcionado mejor que un Dios Titiritero y no pretendo convencer a nadie de que tengo la razón ni mucho menos.

“Si hay otra vida, allá platicamos”

Yo no creo en un Dios todopoderoso, que nos ve desde las alturas y que gobierna nuestra vida, tampoco creo en un cielo, un infierno ni nada que se le parezca, para mí no existe el Bien ni el Mal, ni siquiera las religiones antiguas/paganas me convencen.

ESTOY EN GUERRA CON EL DIOS TITIRITERO, CON EL DIOS DIRECTOR, CON EL DIOS CAPITÁN, CON EL DIOS REY, CON EL DIOS REGIDOR, CON EL DIOS EMPERADOR.

También estoy en total desacuerdo y en contra de todas y cada una de las RELIGIONES del mundo, de la Fe Institucionalizada, de la Ley del Terror, del Cielo Inalcanzable, de los Pecados, de los Castigos, de las Reglas de Comportamiento, de la Fe Idiota, del Fanatismo etc. Y si cuando muera un Ángel me dice “Al infierno por ateo” pues ya ni modo.

“Orden a partir del Caos”

Bueno, pero en que creo yo… por que este “Ordo ab Chao” es completamente perfecto, en total equilibrio, y suena un poco inverosímil que esto surgió de la nada y se ordenó de la nada y se mantiene en total equilibrio de la nada. Así que después de mucho pensar, desarrollé mi propia teoría de lo que en verdad es Dios.

El como surgió y ordenó la Existencia, siempre ha sido un misterio, pero, acaso eso importa? Estamos aquí, respiramos, reímos, comemos, dormimos VIVIMOS, que más da como se creo. Y si es que somos hijos de la coincidencia, pues que buena suerte no?

Pero vayamos al punto interesante: según yo, qué o quién es Dios?

Siempre que explico esto a la gente que me pregunta, les pongo la siguiente analogía:

Imaginen que son una pequeña célula de su cuerpo. Ustedes por si solos no saben que son parte de un “todo” por el hecho de que este es infinitamente grande en comparación con ustedes. También, por si solos no son nada, son ínfimos, son delicados, son totalmente inútiles ya que si no fuera por lo que los rodea, morirían en cuestión de minutos. Así pues, nosotros como unidad, no somos nada, somos diminutos, somos inútiles y somos totalmente dispensables.

Ahora que sabemos que todos nosotros y todo lo que nos rodea por si solo es completamente insignificante, pensemos en el cuerpo entero. Una máquina perfecta que por si sola se repara, que sola se mantiene, y que siempre busca y logra un equilibrio. Y de que está hecha esta máquina? De esas pequeñas e insignificantes células.

“El mar sería menos si le faltara una gota”

Nuestro cuerpo sería menos, ínfimamente menos, si nos faltara una célula. Estaríamos incompletos, aunque fuera una parte mínima, pero lo estaríamos.

Así somos para el Universo. Somos pequeñas unidades imperfectas e insignificantes que en conjunto con todo lo que nos rodea, desde el más pequeño microorganismo hasta la estrella más grande, creamos esta magnánima y perfecta máquina que es la Existencia, y si acaso faltara esa pequeña bacteria o ese gigantesco astro, el Todo estaría incompleto.

Todo lo que existe es parte de este gran rompecabezas llamado “Realidad”, “Cosmos”, “Existencia”. Y de esto anterior podemos afirmar que, si en conjunto creamos la perfección, por ende, nosotros, por más imperfectos que seamos, somos parte de esa perfección. Y cuando hablo de “Nosotros”, me refiero a cada ser y cada objeto que existe.

Esta es mi visión de “Dios”, un gran rompecabezas del cual todos somos parte, y no títeres. Somos parte de Dios, somos células de Dios, somos los creadores y la creación de Dios, somos la perfección, somos lo que hace a Dios ser Dios, somos la razón por la cual la Existencia se mantiene, la razón por la que el Cosmos ES lo que ES.

“Namaste”
Por tanto, cada vez que saludes a tu amigo, cada vez que huelas una flor, cada vez que mires una estrella en el cielo, recuerda que son hermanos, recuerda que son parte tanto tú como tu amigo, la flor y la estrella, del Cosmos, del Universo, de Dios en si. Y cada vez que mates por matar a un animal, una planta, ya que esto no tiene ninguna misión ni beneficio, o maldigas y hieras a una persona, recuerda que te estás dañando a ti y a El Todo. Y sobre todo, cuando abraces a alguien, deleites a un público con tus palabras, o te des un pequeño placer, ten en mente que estás complaciendo al Universo.

Que mejor manera de dar gracias al Universo, a la Existencia y al Todo, que venerando y respetando la vida, admirando y amando todo y a todos los que te rodean y por encima de todas las cosas, siendo feliz, por que si tu lo eres, El Cosmos también lo es.